Podríamos decir que Dolly Parton sobrepasa la etiqueta de gran dama de la música country, porque así es, pero con ello aún nos quedaríamos cortos. Mucho. Empresaria, actriz, productora, compositora, mecenas, filántropa… Dolly también es todo un modelo de mujer que jamás ha permitido que le impongan una imagen determinada ni que duden de su talento e inteligencia por su aspecto físico. Más de medio siglo de carrera dan para muchas anécdotas y unas cuantas lecciones, y de todo ello nos habla la artista en estas particulares memorias que, debido a su falta de tiempo, ha delegado en dos sujetos casi igual de particulares, Eduardo Izquierdo y Eloy Pérez. O eso, al menos, aseguran ellos.
“Pinchar sus canciones hace casi cincuenta años suponía que te dijeran aquello de
‘¿Tú estás tonto o qué?’, pero yo tenía cierto empeño en que la gente conociera a aquella mujer de acusada imagen externa con, lo que era más importante, irrenunciables convicciones internas”, Manolo Fernández.